ACHIPICHÚ

Sin llevarse las manos a la cabeza, Achipichú es tan palabra como lo sería Aserejé, Supercalifragilisticoespialidoso, o incluso el gruñido que se intercalaba en los mambos de Pérez Prado. Luego lo explico.

En primer lugar, reconozco que he dilatado el tiempo entre la anterior entrada y la presente, y eso que se podrá pensar que dado el periodo vacacional podría haberle dedicado algo más de atención, y eso que los jubilados estamos, es un decir, de vacaciones continuas. Pues sin entrar en detalles, este periodo me ha requerido para muchas ocupaciones domésticas, demasiadas quizás e inesperadas, de forma que vamos a intentar coger «el hilo», como se dice ahora.

Curiosa imagen de un alcalde, el de Granada, Don Francisco Cuenca, aunque es conocido coloquialmente como Paco Cuenca, cuestión que nunca me agrada ya que interpreto eso como una familiaridad excesiva, preludio de una falta de respeto; como lo de «Juanma» para el presidente de Andalucía, que lo considero más próximo a un jugador de baloncesto (lo de «Juanma), que a un presidente.
Bueno, pues el alcalde de la imagen, se probó hace unos días unas gafas de realidad virtual para escudriñar lo artístico de la Basílica de San Juan de Dios. La Basílica es indiscutiblemente una maravilla, aunque opino que menos gafitas (por las que seguro que la orden ingresará unos euros), y más tenerla abierta al público que es una suerte encontrarla franqueada, y no digo ya iluminada, salvo un horario para grupos, hay que esperar a una boda postinera y colarse.
Con ese gesto, no es que el alcalde esté haciendo ningún saludo dudoso, imagino que estaría intentando tocar un botarel, o acercarse a la llama de un cirio.
Otra imagen de alcalde con gafas superpuestas:

Evidentemente más laica. El alcalde es Don José Moratalla; aquí sí, Pepe para los amigos y Don José tanto en su vida profesional, es neurocirujano, como cuando fue cargo público.
La imagen tiene sus añitos. Le invité a dar una clase a los alumnos de Iniciación a Ciencias de la Salud que versara sobre los accidentes encefálicos y medulares, lo suyo, y después una visita de rigor al Museo del P. Suárez que por entonces dirigía el que sale en la foto a la izquierda, con bastante más pelo que hoy. El menda lerenda.
Las «gafas» en este caso son un estereóscopo modelo Holmes, indicado para ver la imagen de los pares de fotos que se recogen en relieve. Ya en una entrada antigua recuerdo que expliqué el fundamento. Hoy me lo salto. Las imágenes que en este caso se están viendo son las apropiadas a la profesión del máximo edil: unas excepcionales estereoscopías de anatomía humana realizadas sobre cadáveres reales. La procedencia es de la Universidad de Edimburgo, es una de las joyas del Museo.

Pues ya están los dos alcaldes con «gafas raras». Los dos amigos míos, aunque con el primero no mantengo un contacto continuo, sería un ingrato si no dijera que con Moratalla me une en la actualidad una gran amistad; en algún otro tiempo fue otra cosa, pero nos echamos Mercromina y la amistad es indudable.

Pues en este periodo de calores y sequía, me sigue rondando en la cabeza la idea de porqué a ciertos deportes se les permite afectar al chuponeo del agua además de la agresión medioambiental. El golf. Que no me vengan con lo de siempre, que «genera riqueza y da puestos…», una leche, no genera riqueza salvo para algunos que ya la tienen, y se me antoja, seguro que estaré equivocado por alguna excepción, que lo practica una minoría, esa que se verá beneficiada por las bajadas de impuestos. Y no veas el agua que chupa. A Doñana y a otras zonas, que le den por ahí, que hay que jugar con la pelotilla y el palito. Sin entrar en qué pintan esas extensiones de césped en nuestro clima semiárido.
¿Y no estaba Sierra Nevada ya bastante mecanizada, con torticeras instalaciones suficientemente agresivas?. Pues no, a bombo y platillo nuevos telesillas al parecer mucho más rápidos, de carreras. Un mecano. Justo cuando la nieve ya ha avisado de que si cae, si es cae, no será ni en cubitos para el gin tonic. Aquello de restaurar el orden natural suena a chino. Todo sea por lo mismo, «genera riqueza y da puestos de trabajo». Venga cañones de nieve que necesitan agua, claro, y alteran aún más el orden natural digan lo que digan.
Menos mal que por aquí, por el Sur, no se prodiga el polo como deporte, ese de caballos con un palo largo y que necesita un área tremenda tipo golf. Me callo y no daré ideas.
¿Se han parado a pensar sobre lo que comparten esos deportes?. Insisto, salvo excepciones, comparten el pijerío, los «borjamaris»; que me perdonen los curritos que suben a esquiar un par de fines de semana al año como haciendo un «extra», pero no se justifica la barbaridad prolífica de postes, tornillos, tuercas y motores.

Me fui un fin de semana a Torrox Costa, acabando el verano, para descansar en un antiguo pueblecito de pescadores, de ambiente familiar y sencillo…¡¡¡y una leche!!!. De forma que esquivé a Nerja por la invasión de turistas ingleses y alemanes que parece que estás en otro país, y resulta que en Torrox también se han contagiado. Decenas y decenas de terrazas y tumbonas sobre playas inventadas, tapizadas de cuerpos michelinescos de color cangrejo, donde lo que correspondía era unas cuantas barcas de pesca. ¡¡¡Hasta un Oktoberfest!!!, si señor, y por todo lo alto, y mostradores pletóricos de salchichas polimorfas y polícromas, jarras de cerveza como bacines, unos coloretes en las mejillas que ni en las purgas de Cádiz (su origen es distinto), trajecitos como los de Hitler en su residencia de verano, tirantes y gorrito con plumas…En fin, todo muy de la Axarquía, muy de Torrox.
¿Se imagina alguien que nos pusiéramos a asar espetos de sardinas a orillas del Rhin?.
Lo anterior lo expongo como lo expongo porque encima me enteré por algún parroquiano auténtico (una reliquia), que son los guiris los que nos miran mal, con desprecio, aun somos muy ruidosos, me rio con lo del Oktoberfest y extensiones posteriores, y que tenemos muchos niños que les molestan. Lo de la gentrificación es cierto y no sólo en Venecia, Compostela e incluso en Granada, de la calle vendrán y de tu casa… Difícilmente volveré a sitios así, prefiero un Torremolinos que ya voy avisado.

Y mientras venga virus, del Nilo, de los murciélagos, de la ovejas y las cabras, las procesiones a las que han sometido al fiambre de la reina Isabel de Inglaterra que al menos habrán servido de inspiración, supongo, a no pocas cofradías de por aquí. La guerra de Rusia y Ucrania, el gas, el petróleo, el desastre medioambiental que supondrá el sabotaje/avería de la conducción por el Báltico, el suministro lo veo secundario, que al final como se comprueba hay arreglo menos para bajar el precio de los carburantes y por tanto del consumo, vamos a creernos que los quirópteros van a dejar pasar la ocasión; ilusos que somos.

Y lo peor, la ejecución en Irán de Amini por llevar insuficientemente cubierta la cabeza. Vamos vamos con las teocracias. Mi condena más rotunda.
En una digresión mental, me he imaginado a mi abuela o a mi madre cuando iban a misa con el velo puesto y he pensado ¿Si se les cae o desvía, hubiera salido el sacristán a darles con un candelabro?.
Equivalente.

Y mientras nos crean esa atmósfera plúmbea (la densidad del plomo es 11’35, que ya es) pues no se nos informa de cosas más inmediatas además de positivas. Este gobierno nacional, que no autonómico, ha aprobado decenas de proyectos enfocados al progreso social en estos tiempos. Claro que el Boletín Oficial del Estado no sale en la televisión, y sólo atendemos a lo que nos dice , o nos infecta ésta. Estamos en manos de los grandes grupos editoriales de comunicación, y estos a su vez ¿en manos de quien están?.

Por eso he titulado esta entrada como Achipichú, recordando a Jorge Negrete en «La burrita» , canción de 1947 que hizo inmortal ese guaperas. Tanto para nostálgicos como para curiosos, ahí va el enlace: (Si no sale al pinchar, copiar y pegar en el navegador)

https://www.youtube.com/watch?v=YRvV0NDZu0s

Y como dice la letra de la canción, «pobrecita mi burrito ya no puede caminar, un pasito para adelante, un pasito para atrás»

Vamos a las imágenes del Museo del Padre Suárez. Como siempre comenzaré por las de Ciencias Naturales y luego las de la sala de Física:

Un magnífico ejemplar de Teratología, comparten un cuerpo pero no así las cabezas ni las patas traseras. En las visitas guiadas esto daba mucho de si, que si desarrollo embrionario, que si endogamias…a veces me enrollaba llegando al concepto genético de «vigor híbrido».

Estoy en la duda de si ya la inserté en otra entrada, seré honesto y lo digo, pero es una imagen muy bonita (de un antiguo alumno, David Carmona) y no me resisto. Probablemente el ejemplar más antiguo disecado, de 1745. Por el nombre que figura en la cartela, Felis mytis, hoy casi descabalgado, se trataría de un gato vivérrido o gato marmóreo, aunque desde la seguridad de que es un Félido, bien podría tratarse de lo que actualmente se considera un leopardo enano. Los cambios en los nombres científicos a veces han traído bastantes confusiones.

Y de Física:

Más concretamente de Fotografía. Entre los aparatos de Física se cuenta con bastante material fotográfico, y me he inclinado hoy por este aunque parezca «humilde». Se trata de una prensa de contacto, en los años posteriores conocida como «prensa americana» aunque de americana nada de nada. Se colocaban el negativo y el papel fotográfico muy unidos, ejerciendo presión entre ellos, de forma que el negativo estuviera en la parte que si iba a iluminar (en la opuesta en la imagen), en contacto como dice el nombre, una exposición a la luz unos segundos que según selecciona el negativo así llegará al papel sensible que posteriormente se revelará. Esas tabletas con aldabillas son para asegurar la presión y por tanto el contacto.

Y nada más, esta «burrita» achipichú seguirá ateniendo prioritariamente a los pasitos para adelante.
Os aconsejo que me imitéis, que nos deis los pasitos para atrás.

Feliz otoño.

13 comentarios en “ACHIPICHÚ

  1. Antonio F.

    Pues no caía yo en lo que era «achipichú», pero sí, ya caigo. ¡Qué tiempos! Yo era tan pequeño que intentaba buscarle sentido, y lo traducía mentalmente como «al Chipichú», que sería un lugar al que Jorge Negrete iba en su burrita.

    Desde luego, no iba a jugar al golf, a no ser que estuviera de visita en Escocia. En Málaga hay uno sin nombre, pues fue el primero, denominado «el campo de golf», y con decir eso todo el mundo sabe cuál es (el del Parador del Campo de Golf), pero en Andalucía ya tenemos 93, y un solo Doñana, y este, en peligro.

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    1. Luis Castellon Serrano Autor

      Gracias por tu intervención Antonio.
      Supongo que habrás pinchado el enlace con Jorge Negrete. Impagable.
      De lo de los campos de golf, mejor no hablar. En una reducción al absurdo, mientras más pudiente es un deportista, más área necesita para su deporte y más agresiva es con el entorno. Abrazos.

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  2. Antonio F.

    Curiosamente, tras haber escrito mi comentario anterior, me confirman reserva de un Cultural del IMSERSO en el Hotel Ilunion Golf de Badajoz, desde donde haremos visitas a Mérida, Cáceres y otros puntos ya conocidos, pero no por eso menos dignos de ser nuevamente visitados.

    El hotel, como su nombre indica está en un campo de golf que, como es lógico, debió servir en su día como acicate para promover y vender viviendas en sus alrededores, así como el propio hotel, que, no teniendo clientes de golf, o no teniendo suficientes, recurre al IMSERSO para llenar sus habitaciones a precios reducidos. Para eso se podrían haber ahorrado el campo de golf.

    Seguro que en su día alguien dijo que «genera riqueza y da puestos…», mientras pensaba «aquí me construyo yo un hotel y un par de urbanizaciones (Los Altos del Golf y Golf Guadiana). El agua, ya veremos quién la paga».

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  3. Benicia

    Eso de mirar con unas gafas que transforman la realidad me suena a eso que llaman metaverso del que ahra hablan mucho. Si fuera asi , resulta que ya reniamos metaverso en el Padre Suarez. Pero ten cuidado con la aversion a los extranjeros: empieza uno poniendoles mala cara y acaba votando a voz., perdona la broma. Tampoco me caen bien los campos de golf aunquegracias a este deporte sobresalio nuestro Manolo Santana. Ptecioso el gatito que no recordaba como si me es familiar las ovejitas siamesas. Buen dia con mucho achipichu.

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    1. Luis Castellon Serrano Autor

      Gracias por intervenir Benicia, y además con humor. Una cosilla, el golfista español era Severiano Ballesteros, Manolo Santana fue de tenis. No se hunde el mundo por la confusión.
      Nada de xenofobia por mi parte, pero si la sorpresa, no muy agradable de ver la sustitución de lo autóctono (en plan casi ganivetiano) por extranjerismos que imponen su forma de vida
      rozando el elitismo. Lo dicho, espetos de sardinas a la orilla del Rhin. Abrazos

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  4. Mercedes

    Nunca me había fijado en la palabra «ACHIPICHÚ cuando escuché esta canción.
    Estoy de acuerdo en lo que dices sobre los campos de golf, hay que ser más racionales y administrar nuestro patrimonio natural.
    Me encantan, como siempre, las fotos del Museo.
    Abrazos

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    1. Luis Castellon Serrano Autor

      Mercedes, gracias por intervenir. Me alegra que rememores lo de Achipichú. Jorge Negrete parece que no es muy recordado. Seguro que si Rocío Dúrcal hubiera incluido «La burrita» en su repertorio, sería otra cosa. Y eso que en sus tiempos, Jorge Negrete era un auténtico ídolo.
      Seguiremos incluyendo fotos de elementos del Museo, cuenta con ello. Abrazos.

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  5. Antonio+Bustamante

    Mi querido amigo, un buen rato de lectura, curiosidades y anécdotas que nos proporcionan reflexiones y sonrisas. Para que queremos más al comienzo del otoño.
    Por aquí ya se marcharon las hordas de turistas de todos los peajes, pero como tenemos una temperatura envidiable todo el año, ahora llegan las hordas del INSERSO inglés, alemán y algún ruso disfrazado de algo para que no se note. Estos son menos vociferantes y sin niños. Los guías turísticos les llevan boquiabiertos hasta la plaza de los naranjos en donde sigue el busto gigante del Emérito sin que nadie se atreva a removerlo de su lugar privilegiado. Con la alcaldía del PP tenemos emérito cagado de palomas para ratos.
    Hasta la próxima, un abrazo

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    1. Luis Castellon Serrano Autor

      Muchas gracias Antonio. Y menos mal que no tenéis a Jesús Gil aunque quedan herencias «muy raras».
      No quisiera que se dedujera cierta xenofobia por mi parte, en absoluto, y los que me conocen saben que me es ajena, pero me gustaría que se fuera obediente con aquello de «donde fuereis hacer lo que viereis»; y en la práctica somos víctimas de imposiciones ajenas. Abrazos.

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  6. Antonio Pérez Villena

    Querido Luis, muy acertadas reflexiones. Pues de Don José Moratalla guardo grato recuerdo. Además de ser el facultativo que llevaba temas de mi madre -con gran paciencia- fue el alcalde con el que prometí cargo cuando aprobé la oposición del Ayuntamiento de Granada.
    Luego lo de Sierra Nevada no tiene nombre, peor dicho, no tiene nombre la ciudadanía. Yo estaba currando de técnico de instalaciones en los años del famoso ‘mundial’ y ya quedé horrorizado por lo agresivo de las intervenciones realizadas. Pues bien, con algún que otro ínclito por poco me tiro al cuello, a mi me han llegado a decir a la cara, así sin más ‘si hay que enladrillar Sierra Nevada hasta arriba, se enladrilla… hay que generar empleo’. Lo de siempre, asesinando a la gallina de los ¿huevos de oro?… porque a todo esto, yo pienso que es un agujero negro deficitario per sé…

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